lunes, noviembre 06, 2006

Kafka, turboalimentado

El bueno de Franz Kafka seguro que hubiera tenido mucho que decir sobre los parados desahuciados por el mundo laboral. Pero desgraciadamente la realidad supera cualquier exageración que se le hubiera podido ocurrir. El absurdo e insensible monstruo burrocrático que rige nuestro destino siempre encuentra maneras de superarse a sí mismo en incompetencia e insensibilidad como he podido comprobar recientemente.

Todo empieza porque yo he querido apuntarme a un curso de éstos de FPO sobre diseño de páginas de web. Evidentemente no es para buscar trabajo y tal. Si mis muchos años de experiencia y mi titulación universitaria Con Los Máximos Honores no me sirven para encontrar trabajo, no va a servir de nada un cursillitos de éstos de chinchinabo que dan para tener entretenido a los parados. No, la única razón por la cual quiero este curso es para mejorar el aspecto y el interfaz de este blog que hasta ahora sólo lleva el diseño más básico que se despacha que sólo he modificado para eliminar las mayúsculas y así aumentar la legibilidad.

Bueno, me busco pues un curso de éstos en las páginas que las administraciones públicas tienen a este efecto y encuentro uno que me conviene. Así que pulso en la opción inscribirse correspondiente y empieza la odisea. Porque por lo visto uno no puede inscribirse así como así con el DNI, la tarjeta del paro y tal y cual. No, parece ser que éste es un asunto que precisa de la máxima seguridad, más que la requieren los bancos y las operaciones financieras. Debido a esto, necesito pues un certificado de la Fabrica Nacional de Moneda y de Timbre para poder inscribirme al dichoso curso. Y la adquisición de este certificado requiere un desplazamiento físico a una delegación de Hacienda o similar. Primer cuchillo de palo... Que se repite ya que necesito desplazarme dos veces porque la primera vez cometieron algún tipo de error y el certificado no funcionaba. Incómodo y complicado pero al final consigo el famoso certificado y funciona.

Armado con éste vuelvo a intentar la inscripción pero esta vez surgen "problemas técnicos". Concretamente la web burrocrática me acusa de no cumplir los requisitos para usar el certificado y la firma electrónica. Entre otras cosas afirma que mi plug-in de Java del Firefox es obsoleto y que tengo que actualizarlo al nuevo, el JRE 1.4x. Teniendo como tengo el ordenador al día, no me fío y lo verifico por mí mismo. Y compruebo que efectivamente tengo la ultima versión del plug-in, esto es JRE 1.5... O sea que es la web de la administración que está obsoleta y ni siquiera es capaz de detectar que mi instalación está más al día que la suya. Como no quiero tener que volver a una versión antigua para resolver el problema de obsolescencia que tienen los burrócratas, busco una solución alternativa. O sea otro navegador.

Así que, a regañadientes, debo pasar a usar el Internet Explorer. Después de actualizar a éste ya que sólo lo uso para casos desesperados como éste, e instalarle todo lo que me piden, por fin puedo inscribirme. Pincho pues el botón correspondiente que, por fin, me lleva a un formulario de inscripción. Formulario que me pide datos que no tengo como fecha de antigüedad en el paro, etc. Datos que por supuesto no figuran en la demanda de empleo. Así que toca abortar otra vez y pedirles esos datos al INEM. No por teléfono por supuesto, que ésos no contestan nunca. Pero en este caso, milagro, parece que funciona el correo electrónico y que alguien lo mira de vez en cuanto. Así que, con el debido "lag", consigo esos datos y rellenar el formulario de inscripción. Y por fin me sale una página con un mensaje que indica que me he inscrito con éxito en el curso...

...Y que tengo que imprimir dicha página y entregarla en el centro donde se vaya a celebrar el curso. Centro cuya dirección no figura ni consta en dicho " documento electrónico" por supuesto... O sea que básicamente todo este rollo de Internet, certificados y la polla en vinagre ha servido sólo para crear e imprimir un formulario de inscripción... Bueno, en realidad ni siquiera esto...

En efecto, ya curado de espantos, me dirijo al centro "ad hoc" para entregar el papelito que tanto trabajo me ha costado conseguir pero esto no basta. Allí, tengo que volver a dar la misma información "and then some" que ya he dado en el formulario " electrónico" rellenando otros tropecientos papeles, papelitos hojas, hojitas y similares. Lo mismo que si no me hubiera "inscrito" por Internet...

Y todo esto, ¿para qué? Pues para nada evidentemente porque, después de tanto jaleo y de haber sido seguramente el único que ha perdido el tiempo haciendo la inscripción usando "las nuevas tecnologías", ni siquiera me han acepado. Visto que seguro que ningún otro candidato tenia mis años, mi antigüedad en el paro, mis calificaciones previas o mis cargas familiares, la razón de mi rechazo es evidente y la misma de siempre: soy demasiado viejo. ¿Para qué formar más alguien a quien le sobra ya formación y experiencia que no la sirven para encontrar trabajo? ¿Para qué perder el tiempo? ¿Para qué preocuparse?

Así que olvídense de los cursillos estos que les recomendaban para, a falta de trabajo, seguir formándose por el placer de ampliar los conocimientos. Parece que el monstruo burrocrático que decide nuestros destinos ha decidido que no vale la pena perder tiempo en enseñar a los viejos, total para el tiempo que nos queda... Cuando crees que ya has llegado tan bajo que no puedes caer más, van y te machacan y te hunden más todavía los mismísimos que están cobrando para "ayudarte". Yo ni necesito ni quiero su "ayuda". Me bastaría que dejaran de joderme...


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El Viejo de la Montaña